¿Cuál es el impacto del complejo respiratorio ovino?
Esta enfermedad tiene un gran impacto económico y no solo por su alta mortalidad en animales jóvenes.
El síndrome respiratorio es la principal causa de mortalidad en animales de más de 18 días.
El principal impacto es por pérdidas indirectas como es el retraso en el crecimiento o pérdida de producción. Además, en adultos suele ser crónico, lo cual incrementa las pérdidas.
Al menos el 30% de los animales que llegan al matadero presentan lesiones pulmonares, y la cifra sube al 50% en animales adultos.
En los últimos años se ha observado una reemergencia de la enfermedad, debido a las restricciones en el uso de antibióticos. Por este motivo, son cruciales las medidas de prevención.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la enfermedad?
- Temperatura: sobre todo si hay grandes cambios de temperatura.
- Calidad del aire: siempre es necesaria una buena ventilación y una densidad de animales adecuada.
- Estrés: es crucial evitar los factores de estrés.
Todos los factores de estrés como la esquila, transporte, manejo, etc.… hacen que aumenten los problemas respiratorios.
¿Qué patógenos lo causan?
Mannheimia haemolytica es el principal patógeno del complejo respiratorio ovino, aunque también se encuentran Pasteurella multocida, Bibersteinia trehalosi o Mycoplasmas.
M. haemolytica normalmente se encuentra en las vías respiratorias altas y cuando llega al pulmón produce una Leucotoxina, que es la causante de las lesiones y la patología.
La leucotoxina es el principal factor patogénico del complejo respiratorio.
¿Cuál es la mejor manera de controlar el problema?
Hay dos puntos fundamentales para controlar y prevenir el complejo respiratorio ovino:
- Reducir los factores predisponentes.
- Plan vacunal adaptado a la explotación. Las vacunas más eficaces son las que protegen contra la leucotoxina.